Junio 22, 2023 Por: Presencia 15.

¡Felicidades! 50 años al barrio Colina

En 1973 entregaron la primera etapa de estas casas, la Jac y los vecinos cuentan su historia.

En el especial de familia del periódico Presencia 15 publicó parte de la historia de La Colina. Foto Corser.

Ubicado en el sur de la Comuna 15 Guayabal, está el barrio La Colina que el 20 de en Julio llega a sus bodas de oro. “Este es un barrio de oportunidades para las familias que llegaron” dice La señora Dora Ruiz, Luis Alberto Velásquez, Resfa Cano, Bernardo de Jesús Yepes, María Cristina Arango, y otras familias que pagaron en promedio unos 86 mil pesos por cada una de sus casas.

“En ese momento las casas eran todas iguales, la escuela eran dos salones y allí se guardaban las herramientas con que construían la urbanización. Al terminarlas sus calles estaban pavimentadas, solo había cuatro carros”, así recuerda Doris la presidenta de la Jac parte de la historia de La Colina. Quien además indicó que en este aniversario están las historias de toda una vida.

Doris Rueda presidenta de la Jac, Foto Corser

La Colina fue construida como urbanización por la Cooperativa de Habitaciones y las vendió el Instituto de Crédito Territorial, “todas las casas eran igualitas por el lado donde está la escuela” contó Doris Rueda, quien ha logrado en su administración una huerta comunitaria y visibilizar huertas caseras. Esto sumado a la experiencia educativa que el barrio ha tenido en el tema ambiental. El primer presidente de Jac fue el señor Ramón Cardenas y desde allí han mantenido la entidad comunitaria.

Los 20 de Julio eran una fiesta en el barrio.

Los 20 de Julio había fiesta en la colina y ser fundador del barrio era y sigue siendo motivo para enorgullecerse, aunque también trae desafíos grandes, la señora Dora Ruiz cuenta que “no existía, ni una tienda y todos los que vivían en el barrio, iban al barrio San Rafael y a comprar, “comprábamos las botellas de leche que venían por litro en vidrio y venían en una canastilla, mi casa se convirtió en iglesia, ahí era donde se hacía la misa y donde jugaban los niños” comenta la fundadora Dora Ruiz.

Gloria Cuervo Ruiz (Hija) y Dora Ruiz Cuartas (Madre) al frente de su casa donde la matrona lleva cincuenta años viviendo Foto Corser. Hector Corrales P.

Historias de personas que vieron como las volquetas pasaban por el barrio para construir las siguientes etapas, ver la construcción de La Colinita y aunque hubo inundaciones, tuvieron y tienen momentos más felices que tristes, así lo cuenta Luis Alberto Velásquez, “muchos de los árboles grandes del la quebrada del Bolo, fueron plantados por nosotros”, recuerda entre risas que cuando tenía unos veintitrés años, todos los diciembre, sus amigos y él se iban para las mangas que hoy son el el Club Campestre El Rodeo. “traíamos guaduas y hacíamos un rancho, lo montábamos con los muebles viejos que la gente votaba en diciembre y desde una de las casas hacíamos una línea de extensiones para tener música”

Luis Alberto Velásquez recuerda los torneos de futbol que se hacían al frente de su casa. Foto, Héctor Corser. Héctor Corrales.

Hay casas que todavía pareciera como si la urbe no pasara por allí, casas que están estáticas en el tiempo y en una de ellas, justamente, se encuentra la huerta Feijoa. Las familias que aquí residen están felices por su barrio y aunque las casas se entregaron sin revocar y con un piso de baldosas, era para la señora María Cristina Arango Tobón un palacio, como afirma “la verdad, era mi casa propia, y aunque hubo inundaciones al principio yo no salgo de mi casa, solo con los pies para adelante, para el cementerio”.

María Cristina Arango, montar en bicicleta con mis hijos en la bicicleta que se llama “Monacleta” fue una experiencia inolvidable, las caídas que nos pegábamos porque las calles estaban todavía sin pavimentar o en construcción Corser. Foto Héctor Corrales

Familias que con esfuerzo fueron creado historia porque fueron ellos que ladrillo a ladrillo hicieron parte importante en la construcción de la parroquia San Gabriel de la Dolorosa porque era la única iglesia que tenían cerca, así lo cuenta la señora Resfa Cano Guzmán, la iglesia mas cerquita era la de Cristo Rey, hasta el padre siempre nos decía que debíamos llevar un adobe cuando pudiéramos.

Resfa Cano Guzmán recuerda que su esposo consiguió un muchacho para que cuidara la casa para que otra familia no la cogiera. Corser. Hector Corrales

La Colina ha sido el barrio pionero en sensibilización ambiental, en crear excretas para excretas de animales gracias al ingenio de la señora Aura Escobar quien años atrás gracias a un Proceda ayudó a mejorar y promover el bueno uso de las mismas juntamente con varios.

El mes de Julio será un mes de celebraciones e historias para recordar en las bodas de oro de un barrio que alberga unas 900 familias. Hay que aclarar que el municipio de Medellín dice barrio La Colina a todos los sectores existentes en el sur, sin embargo, aquí hablamos de La Colina donde las familias saben su nombre.

¡Felicitaciones a las familias, La Jac y todos aquellos que son parte de la historia y el avance del barrio La Colina